Por la insólita situación, la Justicia de esa provincia abrió una investigación por mala praxis contra la clínica a partir de una presentación formal de la hija en la Comisaría 1° de Resistencia.
Después de constatar que efectivamente la mujer seguía viva volvieron a internarla en un estado muy delicado de salud hasta que falleció este miércoles.
Según consta la denuncia de la hija, el sábado llevó a su madre a una clínica, donde debido a su estado de salud por una falla en el sistema biliar, la derivaron al área de terapia intensiva.
Allí quedó internada el sábado y cuando regresó, el domingo a la mañana, la mujer fue informada por una médica de que su madre había fallecido, por lo que comenzó a buscar un lugar para cremar el cuerpo de la fallecida.
En el servicio funerario, según el relato del policía, colocaron el féretro aislado con un vidrio y le pusieron un barbijo al cadáver para que su familia pudiera despedirse durante una hora.
En este momento, la hija de la mujer fallecida comenzó a ver que "el barbijo se movía" como si la mujer estuviera respirando. Inmediatamente, dio aviso al personal de la casa funeraria y posteriormente al servicio de emergencias.
“Yo sé que vos vas a querer hablar conmigo, pero ahora en este momento solo quería avisarte que mamá esta con vida. Al final estábamos en la sala crematoria y la vimos con sus signos vitales. Ahora vamos para la clínica”, intentó explicar la azorada joven, a través de un audio de WhatsApp que le envió a un familiar.
Al denunciar el hecho, la hija de la mujer dada por muerta presentó ante la Justicia el certificado de defunción emitido por la clínica y en ese documento, no figuraba la firma de un profesional médico, según expusó Alejandro Domínguez, jefe de prensa de la Policía de Chaco.
La causa quedó a cargo de la Fiscalía de Investigación Penal, en la que se encuentra como subrogante Ana María de Pacce.